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¿Qué son las estrellas?




18 de Abril de 2021

Qué son las estrellas (I)

No es fácil ser una estrella, y no me refiero a las estrellas de Hollywood, me refiero a las estrellas de verdad, a esas que como nuestro Sol están ahí en el cielo hechas de gas (fundamentalmente hidrógeno) y polvo (Partículas sólidas como silicio) que se forman en el interior de las nebulosas por acreción de estos materiales.

 

Quizá deberíamos, para no liarnos, definir lo que entendemos por una estrella, ¿Cuál es el concepto de estrella, desde el punto de vista de la astronomía?

 

El diccionario de la Real Academia define como estrellas dos conceptos interesantes, primero en su primera acepción dice: 1. f. Cada uno de los cuerpos celestes que brillan en la noche, excepto la Luna.

En la acepción décima dice: 10. f. Astron. Cuerpo celeste que emite radiación luminosa, calorífica, etc., producida por reacciones termonucleares; p. ej., el Sol.

En la primera definición podemos decir que sería cualquier objeto que brille en el cielo de forma natural, menos la Luna.

 

En el apartado diez define más concretamente lo que es una estrella desde el punto de vista astronómico. Objeto celeste que emite radiación luminosa, calorífica, etc. producida por una reacción termonuclear: esta será la definición a la que nos atendremos en adelante, será a este tipo de objetos a los que nos referiremos, como estrellas.

Las estrellas son enormes aglomeraciones de materia ¿y, que es la materia? La materia es todo, es todo aquello que es de una u otra forma, que, de una manera real está, todo lo que existe, todo lo que ES, y de una u otra manera está presente. Todo lo que tiene presencia física está hecho de materia.

 

Por tanto, las estrellas que forman galaxias, los planetas que giran alrededor de ellas, los contenidos de los planetas incluyendo las formas vivas, y por ello, nosotros mismos también somos materia. El agua de los ríos, el vino de nuestra bodega, el aceite y la madera del olivo que lo produce, la sangre que circula por nuestras venas y nuestro cerebro son materia.

 

Es decir, la materia es la sustancia que da forma a todo cuanto hay en el universo.

Este concepto es realmente atrevido y desafía un poco nuestro entender. pues es complicado asumir que todo en el universo está hecho con el mismo material. Por tanto, asumiremos que una estrella, un planeta y un humano estamos hechos de la misma materia.

 

Sin embargo, aunque parezca imposible, esto es así y tiene una sencilla y fácil forma de explicarlo. Veamos, sabemos que en la tierra podemos encontrar la materia en tres estados que son: sólido, líquido y gaseoso. También sabemos que dentro de los sólidos hay una infinidad de formas densidades y resistencias, madera, rocas minerales, polvo, etc. Igual nos pasa con los líquidos, agua, aceite, vinos y tantos otros, son también distintos entre ellos.

 

El mismo efecto podemos observar con los gases: Gas butano, propano, natural, etc. etc.

¿Cómo puede ser entonces, que todas esas formas y estados estén hechos de la misma materia o sustancia básica? Y, lo que es más, ¿Cómo pueden las estrellas estar formadas de esa misma materia? Pues vamos a ver:

 

Las pequeñas dimensiones de los planetas, asteroides, estrellas marrones y otros muchos objetos celestes, permiten a la materia organizarse en átomos de diferentes características, con diferente número de electrones, protones y neutrones. (Véase la tabla periódica de los elementos). Estos diferentes tipos de átomos se unen entre ellos para formar moléculas que nosotros podemos analizar, ver. medir y estudiar. Por tanto, saber de qué material estamos hablando, por su composición molecular, sabremos si es un líquido, un sólido o un gaseoso y dentro de cada uno de ellos si lo que tenemos delante es una copa con vino o un trozo de pan.

 

Entonces, analizamos nuestro entorno y comprobamos que tenemos una enorme cantidad de sustancias diferentes… y, ¿todo eso está en el Sol y las estrellas? 

Sí.

 

Pero para entenderlo hay que admitir que además de los tres estados de la materia que encontramos en la tierra, antes mencionados, la materia puede estar en un cuarto estado llamado plasma. En este cuarto estado, la materia no está organizada en átomos neutros (con el mismo número de partículas positivas que negativas), sino que estos están ionizados, al haber perdido todos o parte de sus electrones, debido a las altas presiones y temperaturas que soportan en el interior de la estrella. El resultado es una sopa de iones, donde los electrones van por un lado y los núcleos atómicos (Iones) van por otro. Impidiendo así, la formación de los diferentes átomos estables que darían lugar a las moléculas, que tan familiares nos son aquí en la tierra. 

Aunque no sea un estado de la materia al que estemos acostumbrados, el 99 % de toda la materia se encuentra en este estado.

Cómo se llega a ese estado tan diferente o ¿cómo nace una estrella? 

Como sabemos, las estrellas se forman por acreción de gas y polvo que son los componentes de las nebulosas.

 

Por alguna razón, en un punto concreto de la nebulosa se aglutina una importante cantidad de materia, esa materia atrae más materia de sus proximidades, su gravedad aumenta y su poder de atracción también. El objeto atrae todo lo que encuentra en su camino y va limpiando su entorno. Esto le convierte en una proto estrella, todavía no es una estrella, pero sí el germen, el embrión, del cual en unos pocos millones de años tendremos una joven y brillante estrella.

 

La nebulosa de la que se formó nuestro Sol era una pequeña nebulosa al parecer proveniente de los restos de una o dos estrellas anteriores. Esta nebulosa era una nube de gas y polvo rica en minerales pesados, como lo demuestran el hierro, el níquel y otros minerales existentes en la tierra. Esto, junto con la diferencia de edad entre el universo (unos 13.000 millones de años) y el sistema solar (4.700 millones de años), es lo que demuestra según los expertos que realmente, nuestro Sol es una estrella de segunda o tercera generación. 

 

El 99,2 % de toda la masa del sistema solar se encuentra en el Sol, lo que significa que con el otro 0,8 % están hechos todos los planetas, asteroides, cometas y demás objetos del sistema. De esta masa, Júpiter acapara casi dos veces y media la masa de todos los demás planetas juntos, esto quiere decir que Júpiter es el planeta gigante del sistema solar. Y que, por tanto, de haber existido suficiente gas y polvo como para que se hubieran formado dos estrellas, Júpiter sería la compañera del Sol y las dos juntas serían un sistema estelar binario.

 

Pero esto no fue así, y, a Júpiter aún le faltan más de otras 70 veces su masa actual, para que pudiera convertirse en una estrella de las más pequeñitas. Masas que ya no adquirirá nunca, pues el entorno está relativamente limpio y los restos de material que sigue atrapando, no llegarán ni de lejos, a la masa que necesitaría para convertirse en una de las estrellas más pequeñas.

Texto Francisco Ortiz

Foto Javier Flores

 



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