Si quieres vivir una experiencia inolvidable te recomendamos visitar la comarca del Valle de Lecrín y más concretamente, el municipio de Padul, donde podrás hospedarte en un antiguo molino harinero de época árabe.
Hoy te enseñamos uno de los alojamientos más singulares de la comarca del Valle de Lecrín.
Los Alojamientos Rurales Al Agia, un molino árabe harinero convertido en un complejo rural con mucha historia.
Sus propietarios, Paco y Teresa, inauguraron este complejo en junio de 2002 y desde entonces han recibido a huéspedes de todo el mundo.
La historia que envuelve a este alojamiento hace que cuando un huésped reserve en los Molinos de Padul se cree un vínculo especial entre esa persona y el molino.
De los Molinos atrae especialmente sus entornos, jardines, la decoración interior de las viviendas, los animales del complejo y por supuesto, la historia que ha hecho que un alojamiento familiar se haya convertido en hospedaje para miles de huéspedes de todo el mundo.
El municipio de Padul destacó por albergar varios molinos harineros de época árabe. La importancia de estos molinos y su cercana localización dió nombre al lugar donde se ubican, el “Camino de los Molinos”.
Los tres molinos de la zona eran conocidos como Molino Seña Anica, Molino Feliche y Molino Mísqueres.
Para conservar la historia que envuelve a toda esta zona, Paco y Teresa utilizaron la denominación de estos 3 antiguos molinos como nombre de cada una de las viviendas de su complejo rural.
La historia de esta familia y los molinos se remonta al año 1954 cuando Paco y Encarna (los padres de Paco), deciden comprar un molino harinero de época árabe, el Molino Mísqueres.
Además de ser su vivienda familiar, Paco y Encarna convirtieron este entorno en un merendero y zona de ocio y crearon así la popular piscina de los Molinos.
Su bello entorno, jardines, ríos y manantiales, acompañado de un pequeño bar y una piscina, hicieron que este lugar se convirtiera en el lugar favorito de descanso de muchas familias paduleñas, incluso procedentes de otros rincones de la provincia de Granada.
No había día de verano en el que los Molinos no se llenara de familias, parejas y amigos para disfrutar de un refrescante baño, así como del entorno y el ambiente que se creaba en él.
Años después, con la muerte de Paco, este espacio fue perdiendo su afluencia. Aunque, Encarna, su esposa, continuó recibiendo a visitantes y amigos. Este era el mejor lugar para disfrutar de un espacio fresco y agradable después de un día de trabajo. Además, Encarna siempre les recibía con un vaso de agua fresca o una copita de vino.
Años más tarde, su hijo Paco retomó el espíritu emprendedor de la familia. Es así como en el año 2002, Paco y su esposa Teresa, le aportan un nuevo enfoque al legado familiar.
A través de una rehabilitación crearon el Alojamiento Rural Los Molinos de Padul.
El esfuerzo y el constante trabajo de Paco ha hecho que este molino aún esté en funcionamiento y ha creado el Museo Etnográfico de Los Molinos de Padul. Es así como Paco ha conseguido crear una exposición con las herramientas, utensilios y aperos de labranza más utilizados por nuestros antepasados, un espacio con mucha historia.
La entrada al museo etnográfico es gratuita para todos los huéspedes del alojamiento. Sin duda, una visita que te transportará a los inicios de nuestra historia y un espacio para recordar y apreciar el duro trabajo que se realizaba durante las labores del campo.
En el año 2019, Paco y Teresa crearon un nuevo concepto de alojamientos rurales. Naciendo así el complejo de alojamientos Los Miradores y sus dos casas-paisaje, el Mirador de los Quinientos y el Mirador del Alto Cijancos.
Un alojamiento diferente a los Molinos, donde sus viviendas destacan por sus impresionantes vistas panorámicas. Pero que, a la vez, conservan la esencia de lo rural y el mimo por los detalles decorativos de cada rincón.
Este complejo de alojamientos recibe el nombre de Al Agia, por ser el nombre del pago de estos dos entornos.
Los Molinos de Paco son conocidos por todos los habitantes de Padul por ser un lugar que recuerdan con especial cariño y donde pasaron muchos momentos de su infancia. Su pequeño museo hace perdurar la historia y la cultura agrícola y ganadera. Y sus grandes zonas verdes te sumergen en el disfrute de la naturaleza.
Reserva en Los Molinos de Padul y hospédate en un alojamiento con más de 100 años de historia.
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